domingo, 1 de enero de 2017

Amarillo y otros colores









 Cada artista tiene una gama de colores diferente que utiliza en sus obras, la cual, depende de su estudio, época y de su misma cultura que determinará los colores que va a utilizar en sus creaciones. Hay artistas, como el francés  Ives Klein que utilizó, de preferencia, el azul añil en gran parte de sus obras y esculturas. La época azul de Picasso fue motivada  a la pobreza,  el azul de Prusia era el más barato. Es el azul de la miseria.




La coloración de amarillos utilizada por Vicent van Gogh en sus “Girasoles”, las cuales, los pintó para recibir su amigo Paul Gauguin, en Arles; amarillos que con el trascurrir de los años se han ido oxidando y tomando unas tonalidades ocres. El barniz que utilizaron los marchand para revivir y  refrescar las obras ha modificado los colores. El amarillo para Vicent van Gogh fue un color que prevalecía en su obra. Cuando hacia la lista de colores predominaban los amarrillos, pedido que él le hacía a su hermano Theo. Según algunos científicos la costumbre de tomar ajenjo o absenta bebida alcoholizada modificó la retina de van Gogh y veía el ambiente más amarillento (Teoría de la absenta) El amarillo de cromo se ha oxidado con la luz de los museos a través de los años.
Los artistas neoplásicos como Piet Mondrian redujeron su paleta al amarrillo, rojo, azul, negro, gris y blanco; eran colocados en su estado puro, lo mismo que todos los integrantes del grupo holandés Stijl y a partir de esta limitación de colores realizaron sus creaciones. Hoy otros artistas quienes utilizaron infinidades de colores como Hundertwasser. Joseph Albers trabajaba con diferentes amarillos, rojos y azueles traído de diferentes partes del mundo. Los colores tienen su magia, sus símbolos y su sacralidad. Cada artista tiene sus colores, es como si viniera en su formación genética; hay una manera de verlos, no todas las personas tienen la capacidad para ver las diferentes variantes y poder armonizarlos. El maestro Carlos Cruz Diez tiene sus colores muy particulares. Para él, desde hace años, hay un color en el espacio, color que se construye a través del desplazamiento del espectador o el color virtual que no están colocados físicamente pero se producen.


Cuando reviso mi obra desde mis comienzos el color amarillo está vigente, en “Las gordas” los blancos y amarillos se mezclan creando diferentes tonalidades; en “Las Máquinas” está presente en grandes planos, flechas, puntos, hojillas y plantillas, como también, en mis primeras obras realizadas en París, en esas obras  de formatos irregulares predominan en ellas el amarillo. En mis obras geométricas, este color está presente, y aparece en armonía en un conjunto de colores. Hay un momento que después que ya he pintado varios formas, algo muy interno, me señala donde tengo que  colocar el cuadrado o el pequeño triángulo amarillo; no es igual en todos los cuadros, a veces, la exigencia de la obra me demanda donde tengo que colocar una nota de gris, azul, verde o rojo.


Ese armónico ensamblaje, esa fraternidad de gamas, se da por los años de experiencia mezclando colores. He aprendido a ver y es muy posible que desde mi niñez fuera asimilando el secreto de las combinaciones cuando al lado de mi madre veía como ella cruzaba los diferentes hilos de colores en su pequeño telar para hacer las capelladas...
No puedo dejar de mencionar al maestro José Requena. Estaba pintando mi primer paisaje,  veía la pared blanca y utilizaba el blanco del tubo directamente; se me acerca y él me dice: “Esa pared no es blanca, hay en ella muchos matices de colores” y, desde ese momento, aprendí a ver el cromatismo de las cosas. Hoy trabajo con todos los colores, pero el amarillo y el azul, me atraen, pero, sé dónde los voy a colocar. Esos son los secretos y la gran magia de los colores y hay muchos artistas que los colores forman parte de su lenguaje.
Esteban Castillo                                                  estebancastillov@gmail.com

1 comentario: